Basta con conocer bien tus hábitos financieros, saber el tipo de préstamo que necesitas y establecer objetivos claros.
Traemos para ti una serie de estrategias de ahorro inteligente que te permitirán encontrar el balance perfecto entre cumplir con los pagos de tu préstamo y ahorrar un poco de dinero.
Elegir el préstamo ideal
El préstamo ideal es aquel que cumpla con tus necesidades específicas en ese momento. No existe una fórmula que defina al préstamo perfecto, sino que debes tomar en cuenta tus capacidades de pago, reflexionar qué tanto dinero requieres y para qué lo necesitas.
Lo mejor es comparar diferentes tipos de préstamos para elegir aquel con las mejores tasas de interés, los plazos de pago más cómodos y, en general, el que te ofrezca mayores facilidades para ahorrar durante el proceso.
Formas para ahorrar con un préstamo
Hoy en día existen increíbles estrategias que se pueden implementar de manera fácil para maximizar los ahorros, incluso cuando se tiene un préstamo.
Estas son algunas de las recomendaciones que te ayudarán a disminuir los costos de tu préstamo y mejorarán tu salud financiera a largo plazo.
Consolidación de deudas
Esta es la estrategia ideal para ti si tienes diferentes deudas al mismo tiempo. La consolidación de deudas se basa en pedir un préstamo especial para esto, donde se agruparán todas tus deudas en una sola, por lo tanto, pagarás una sola cuota mensual. Esto te evitará estar al pendiente de muchos pagos mensuales y, en cambio, solo te deberás preocupar por las cuotas e intereses de un solo préstamo, de esta manera será más fácil organizar tus finanzas y te dará un respiro mes con mes.
Amortización anticipada de mi préstamo ¿La mejor opción?
Pagar anticipadamente un préstamo es una estrategia de lo más inteligente. Si repentinamente cuentas con un dinero extra, en lugar de gastarlo en algo innecesario, puedes utilizarlo para abaratar tu préstamo. ¿Cómo se hace? Abona este dinero al prestamista, de esta manera reducirás la cuota mensual o el plazo de pago, así ahorras un poco de dinero. Otra opción sería pagar todo el préstamo de una sola vez, y ahorrarse todos los intereses del tiempo restante, pues dejarán de generarse.
¿Ahorrar pidiendo un importe más alto?
Esto podría sonar un poco controversial para muchas personas, especialmente porque en el mercado de los préstamos, no es recomendable solicitar más dinero del que necesitas; sin embargo, pedir un importe más alto puede resultar en un ahorro en ciertas ocasiones.
Existen algunas empresas cuyos préstamos tienen intereses progresivos, es decir, varían según el monto solicitado. Entre más grande sea el monto, menor es el interés a pagar, lo que llevaría a un ahorro al disminuir el monto en la cuota mensual. Cabe recalcar que esto no se aplica en todos los casos, pues depende de la empresa prestamista elegida.

Otros tips para ahorrar durante tu préstamo
Existen muchas estrategias adicionales para poder ahorrar cuando estás pagando un préstamo al mismo tiempo. No es necesario hacer grandes cambios, ni aplicar estrategias complicadas, basta con un poco de organización en las finanzas personales. Estos son algunos otros tips que puedes implementar.
Paga más del mínimo
Una de las mejores estrategias que puedes aplicar cuando tienes un préstamo activo o una tarjeta de crédito, es no realizar siempre el pago mínimo mensual. Si tienes un poco más de dinero disponible, paga más de lo requerido. Esto te ayudará a reducir el saldo principal mucho más rápido; además, evitarás los intereses que se acumularán con el tiempo.
Pagos anticipados
Muchas veces, aunque tengas ingresos regulares, puedes recibir un dinero extra, ya sea un bono, un aumento de sueldo, o cualquier ingreso adicional. Cuando esto pase, lo más recomendable es considerar hacer un pago anticipado de la cuota mensual de tu préstamo.
Ajusta tu presupuesto
Organiza tu presupuesto. Los gastos hormiga pueden tomar una gran parte de los ingresos mensuales sin que te des cuenta de ello. Revisa en qué gastas más, e intenta reducir esos gastos innecesarios para que pongas más dinero al pago de las cuotas mensuales de tu préstamo.
Sé realista
En primer lugar, debes considerar si realmente tienes la capacidad de afrontar una deuda. Es decir, solicitar un préstamo es una gran responsabilidad que conlleva esfuerzo y disciplina. Si te esfuerzas por organizar tus finanzas, realizar tus pagos a tiempo, y pagas más del mínimo requerido, terminarás reduciendo el saldo principal más rápido y te sorprenderá lo mucho que puedes ahorrar durante tu préstamo.
Ahora, es importante mencionar que el ahorro no es el único beneficio, si cumples con todas estas condiciones, a la larga generarás un buen historial crediticio, lo que te convertirá en un buen candidato para otros prestamistas; incluso, puedes solicitar montos mayores en caso de que los necesites en algún momento.
¿Listo para ahorrar en tu próximo préstamo?